Entradas

Mostrando entradas de 2017

¿Somos como Él?

Imagen
Todo mi bachillerato lo hice en un colegio católico, donde todas las semanas íbamos a misa, donde una o dos veces a la semana nos impartían clases de religión, una o dos veces al año íbamos a retiros espirituales, a los llamados "EJES" (Ejercicios Espirituales), con el objetivo de estar en paz con uno mismo y estar en paz con el ser supremo: Dios. Desde muy niños, en casa, incluso en el colegio, nos enseñaron que el ser humano está hecho a imagen y semejanza de Dios, y que por lo tanto, nuestras acciones durante nuestro paso por la vida serían cuidadosamente observadas por Él, por todos los santos y una gran compañía de ángeles, arcángeles y seres celestiales.  Si haces algo mal, recibirás un castigo, si actúas y haces el bien, ganarás escalones al cielo, o quizás, estarás más cerca de Dios y todos los demás seres. Pero con el paso del tiempo, nos vamos dando cuenta que el ser humano no es Dios. Si hay un ser que quiso que nosotros fuéramos una imagen de él, pues lo

Empoderamiento, superación y liderazgo. Belleza... quizás.

Imagen
Revisando anoche las redes sociales, mientras nos encontrábamos viendo el concurso de belleza (sí, admito que lo veo, que lo comento y que hago chistes con eso), alguien publicó estas tres palabras, en respuesta a una foto de instagram: "EMPODERAMIENTO, SUPERACIÓN Y LIDERAZGO (...)", y las escribo en mayúsculas porque considero que se merecen ese trato ortográfico y de escritura. Desde el año pasado, los organizadores dieron una clara señal y prácticamente lo gritaron, aunque algunos no han querido escuchar, que las mujeres, aparte de tener una belleza física, la superficial que todos podemos ver, esa de medidas casi perfectas, de sonrisa conquistadora y ojos hermosos, hay una belleza que no es perceptible a la vista; sin embargo, ésta última es la que en un momento dado de la vida de esas mujeres, es la que quizás las ha llevado hasta donde se encuentran ahora, o anoche, para ser más claro: tratando de llevarse la anhelada " Mikimoto "(Sí, también me emocioné

Lo que el fuego no se llevó.

Imagen
Era la noche de año nuevo de 2000 - 2001. Estábamos en casa de una tía. A la 1:15 a.m. recibimos la llamada: mi casa se estaba quemando. Cuando llegamos el escenario fue impactante, el humo y la destrucción bloquearon mi vista y ensordecieron mis oídos. Nunca imaginé que algo así nos podía pasar. No se perdieron vidas humanas, pero si perdí un cachorrito  de "tinaquero" que recién había adoptado. Al día siguiente, en medio de las cenizas de mis libros, pude rescatar alguno de los dibujos que tenía en las paredes de mi cuarto, aunque la mayoría se habían mezclado en lo fangoso del agua y lo calcinado, alcancé a ver éste que había hecho tan solo dos años atrás, 1998. Uno de los primeros dibujos de manos que hice sobrevivió a la tempestad de las llamas, inmortalizando en él el reflejo del calor con matices ocres y amarillos. Es el recuerdo de la intensidad de un fuego que no pudo con el dibujo. Es la representación de la fuerza y las ganas por sobrevivir tras cualquier